11 enero 2015

FÁRMACOS NUEVOS

Obra del pintor Alfredo Cabañuz. Exposición de Noviembre 2014. Galería Cristina Marín. Zaragoza



La Agencia Europea del Medicamento (EMA) aprobó en 2014 ochenta y dos nuevos medicamentos, la mayor cifra de aprobaciones en el último lustro. Casi una cuarta parte, 17 fármacos, están indicados para el tratamiento de enfermedades raras, aquellas cuya prevalencia es menor de 5 personas por cada 10.000 habitantes en el continente.

Ya 2013 había superado al año  anterior habiendo aprobado 11 nuevos medicamentos huérfanos, 3 más que en 2012, año que marcó otro récord. La orientación de la investigación farmacéutica hacia nichos no explorados y los incentivos otorgados a los laboratorios que desarrollan este tipo de fármacos (desde exención de tasas hasta procedimientos acelerados de aprobación) han sido claves para estas apariciones terapéuticas. Entre las patologías que encuentran por fin una opción de tratamiento están la distrofia muscular de Duchenne, la protoporfiria eritropoyética o la deficiencia de células madre limbares. Para esta última se ha aprobado la primera terapia basada en células madre en Europa.

Oncología ha sido una de las áreas terapéuticas más beneficiadas, con 8 nuevos medicamentos, algunos de ellos para cánceres poco comunes. La hepatitis C también vivió un gran momento, con cuatro novedades, que además fueron aprobadas tras haber obtenido una evaluación acelerada por parte de las autoridades. Las altas tasas de curación y la capacidad de cambiar la forma en que los pacientes de esta enfermedad son tratados jugaron un papel crucial para que la EMA concediera a los fármacos este tipo de evaluaciones.

También ha sido un año bueno para los biosimilares, con tres aprobaciones, una menos que en 2013, si bien en los tres años anteriores solo se había aprobado un producto más de estas características.

El ritmo de aprobaciones de genéricos se mantiene con respecto a los últimos ejercicios, alrededor de la veintena de positivos. Son cifras, sin embargo, alejadas de los picos que se produjeron la última década, cuando podían alcanzarse el medio centenar de nuevos EFG. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que estos pueden ser aprobados por la vía descentralizada, es decir, país por país, y por tanto esta cifra no es tan significativa como en el resto de casos. 

27 diciembre 2014

HACERSE ENTENDER


Este libro está escrito por dos médicos que explican de modo sencillo (como ha de hacerse a quien no es del mundo sanitario), esas preguntas que suelen hacerse en la consulta y que tanto cuesta a algunos responderlas de forma que se entienda lo que uno sabe o le preguntan...
Posiblemente, el inconveniente más frecuente entre el mundo sanitario y quien no pertenece a tal mundo (pasa igual en el mundo del Derecho) es la traducción, el hacerse entender.  Este libro, editado en su momento por Cauce Editorial, es uno de los mejores que se pueden leer primero por nosotros, y luego recomendar a quien desee saber un poco de las dolencias de las que hablamos los médicos.

08 diciembre 2014

PERFECCIONISMO

El perfeccionismo es uno de los males del ser humano que puede pasar inadvertido o incluso reverenciado por un tipo de sociedad, a pesar de que provoque sufrimiento al que "lo padece". Ser entrevistado para un puesto de trabajo y ser perfeccionista suele ser destacado por el entrevistador como poseedor de un tipo de personalidad a destacar. Incluso el entrevistado lo exagera  para desviar sus posibles carencias y, sobre todo, para impresionar a su interlocutor. No en vano, poseer esta "característica" imprime un sello de calidad, un valor añadido a quien busca rentabilidad para su negocio o empresa. 
Pero leamos lo que el Diccionario de la RAE dice de perfeccionismo: "Tendencia a mejorar indefinidamente un trabajo sin decidirse a considerarlo acabado".

Hasta aquí, podría valorarse positivamente ser perfeccionista, pero demos una vuelta de tuerca más al tema: ¿qué hay tras la búsqueda constante de la perfección...?. ¿Por qué genera insatisfacción continua el trabajo efectuado...?. El perfeccionista nunca se siente bien con lo que ha hecho o producido. Siempre está disgustado con sus acciones, inconscientemente, sin saberlo. Es por ello que ha creado un ideal, como todos subjetivo, que determine cómo ser, hacer, producir lo que construye... incluso a él mismo. Y su autoexigencia es progresivamente mayor. Su interior nunca se siente reposado, equilibrado, satisfecho, nunca ve la realidad, siempre elude disfrutar con sus acciones.
Como todo tipo de personalidad, comienza con el nacimiento y se perfecciona con los años. Por ello es tan importante la figura de los padres en la educación del niño y de evitarle conductas que en el futuro le puedan provocar dolor. Porque el perfeccionista SUFRE.
El perfeccionista es muy sensible a las críticas. No las percibe como posibilidad de mejora sino como detracción a su depurado trabajo, su autoexigencia, rigiidez. Y es por ello que se irrita y genera somatizaciones que luego vemos en nuestras consultas: cefaleas, estrés, tensión muscular patológica (espalda, lumbalgias...), bruxismo, etc
Y no digamos el rechazo que genera en quienes le rodean. Al principio pueden ser buenos receptores de su tipismo, pero en cuanto pasan unas semanas... el apartheid que sentirá será mucho más real que la satisfacción que al principio les pudiera generar

¿Y qué hacer...?

En primer lugar deben aceptar que en su interior existe esa "vocecita" que les indica constantemente los defectos de sus obras, de sus acciones, y aprender a reirse de ella, de preguntar a los demás si les parece bien lo que ha hecho o si encuentran defectos. Saber cuál es la realidad ayuda a confrontarse con uno mismo, aunque la realidad sea al principio más átona de lo que pudiera pensarse. Lentamente irán aceptándose y si , además, hierran en alguna ocasión, mejor todavía.
Desterrar la patología psíquica que conlleva el perfeccionismo debe ser, siempre, la opción más acertada. Y que los demás veamos hacia donde puede conducir el exceso... más aún. Aunque no se sea sanitario.

24 noviembre 2014

LIBRO NOVIEMBRE

Me permito recomendar este libro con el que he comprendido, creo, un tema al que siempre he temido por lo desconocido que era para mí, por farragoso, por pensar que mi mente solo podría confundirse más... etc. Y no. Me ha abierto respuestas y.. preguntas.
Escrito por una doctora en física, especialista en física cuántica, habla de éso, de física cuántica y de los misterios que el humano no suele comprender. Es la autora muy didáctica cuando nos somete a la comprensión del gato de Schrödinger o El oráculo de Star Trek, por ejemplo. 

06 octubre 2014

REFLEXIÓN

Ha sido publicado recientemente en España el libro. ¿Somos todos enfermos mentales? (Ariel. 2014), escrito por el Dr. Allen Frances, catedrático emérito de psiquiatría de la Universidad de Duke.
Tras leerlo y escuchar la crítica que este refutado profesional efectúa de la Industria Farmacéutica y de los propios médicos que prescriben fármacos me surgen muchas preguntas. ¿Es tan enorme la presión de la Industria Farmacéutica sobre los médicos prescriptores americanos, chinos, belgas, franceses, japoneses, españoles... para lograr crear enfermedades cuando antes no se diagnosticaban para usar un fármaco concreto...?, ¿se hiperfarmacoliza al ciudadano, a nosotros mismos...?. Ejemplos para afirmar la pregunta los cita este profesional con profusión. Y otros antes que él también llegaron a esta conclusión: ¿Píldoras o Freud?, de Adolf Tobeña. (Alianza Editorial.2013), o La timidez o cómo la psiquiatría y la industria farmacéutica han convertido emociones cotidianas en enfermedad. Christopher Lane. (Zimmerman 2011). 
Como todo en la vida, siempre hay, al menos, dos partes, el haz y el envés, la cara y la cruz. Que la industria farmacéutica ha contribuido a mejorar la calidad de vida del ciudadano es una objetividad, que como toda empresa que se precie quiere seguir ganando dinero y si puede más, mejor, también es lógico. Sin embargo, en el otro lado de la mesa está el médico, el prescriptor, el profesional cuyo deber es estar informado para diagnosticar acertadamente al paciente que a él acude en busca de ayuda y que no siempre es fácil.
Los ejemplos de cómo los tratamientos sobre el autismo, por ejemplo, se han multiplicado por 40 en EE.UU. tras haber sido incluido en el DSM IV (Manual  diagnóstico y estadístico en el que se definen y describen las diferentes patologías mentales en el que el autor participó) es uno de los ejemplos que cita el Dr. Frances. También cita otros ejemplos el Dr. Lane en su libro al hablar de cómo la timidez dejó de ser tal y se calificó como síndrome fóbico social con el consiguiente tratamiento farmacológico... Entonces, añade el Dr. Frances: si con frecuencia me olvido de las cosas, tendré seguramente una predemencia, si cuando como mucho podré ser diagnosticado de síndrome de comedor compulsivo, y si tras perder a mi esposa con la que he vivido toda una vida estoy triste más de una semana estaré entrando en un cuadro de depresión... 

Medicar la vida, perder la relatividad y el contacto con el paciente puede generar una exageración del diagnóstico, sí. No digo que se haga pero sí puede llegar a hacerse y en eso no gana nadie, ni unos porque les hace ser dependientes de una pastilla, olvidar que se tiene conciencia y que los seres humanos hemos sobrevivido millones de años gracias a nuestra capacidad de afrontar y superar la adversidad, y otros porque podría llegar a perdérseles el respeto obtenido por favorecer arrancar vida a lo que en otrora era muerte.

Lo dicho, el libro merece ser leído, con capacidad crítica y autocrítica. Este mismo fin de semana he oído en un reportaje de televisión que España era el país de la UE que mayor consumo de ansiolíticos hacía... Es para pensarlo. Hay muchas más soluciones para luchar contra la ansiedad, algo normal por otra parte...

16 agosto 2014

INVESTIGACIONES POSITIVAS EN ALZHEIMER



Una investigación publicada en estos días en el EMBO molecular Medicine  y en la que han participado investigadores del  Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) relaciona ciertos déficits cognitivos que sufre el humano cuando envejece con la pérdida gradual de colesterol de la membrana neuronal del hipocampo. El efecto de esta pérdida puede provocar que una proteina llamada Akt  permanezca activa, evitando que las neuronas ofrezcan una respuesta a nuevos estímulos que tienen como consecuencia la configuración de la memoria. 
Averiguar las bases fisiológicas de los déficits cognitivos que acompañan el envejecimiento, sus cambios observados durante el envejecimiento normal, sus características y las que no lo son,  podrán caracterizar los responsables de los déficits cognitivos profundos que caracterizan, por ejemplo, la demencia tipo Alzheimer.
Los científicos aumentaron experimentalmente los niveles de colesterol en las neuronas hipocampales viejas equilibrándolas con las jóvenes y el resultado fue positivo.  Estos resultados abren una vía que hasta el momento no estaba abierta, por lo que se deduce un feliz acontecimiento de nuestras investigaciones nacionales aún en tiempos de una crisis que no cesa.

03 agosto 2014

TRASTORNO LÍMITE DE LA PERSONALIDAD y SUICIDIO


Se ha podido leer en los Cuadernos de Psicosomática y Psiquiatría de enlace del mes de abril un interesante artículo firmado por la Dra. Vila Pla acerca de la Alteración de la identidad y el riesgo autolÍtico en pacientes con trastorno límite de la personalidad (TLP).
Ha estudiado una muestra de 170 pacientes diagnosticados de TLP mediante la SCID II, la DIB-R y la entrevista clínica que iniciaron un tratamiento intensivo en el Hospital de Día. Clínicos expertos cumplimentaron la escala de Impresión Clínica Global para TLP al ingreso en el Hospital de Día. Esta escala muestra la severidad del cuadro y la respuesta al tratamiento, entre ellos la alteración de la identidad. Asimismo se registraron los intentos autolíticos previos al ingreso.
Los resultados mostraron que los pacientes con TLP que al menos habían mostrado una tentativa autolÍtica tenían una identidad significativamente mayor según  la ICG-TLP que los pacientes que nunca habían efectuado un intento. Además, estadísticamente, el número de tentativas autolÍticas correlacionaba positívamente con una mayor alteración de la identidad. La alteración de la identidad y el sentimiento de vacío eran las únicas escalas de la ICG, además de la que valora el suicidio específicamente, que correlacionaban significativamente con las tentativas autolíticas, por lo que concluye que la alteración de la identidad está relacionada con los intentos autolíticos previos en mayor medida que la impulsividad, la inestabilidad emocional, afectiva y otros síntomas propios del TLP.