13 diciembre 2009

TABACO, NO.
Con la nueva Ley Antitabaco, en la que se prohibe tajantemente fumar en los lugares públicos, se va a evitar que más de la mitad de los 800.000 profesionales que trabajan en establecimientos hosteleros, sufran las consecuencias dañinas del humo en sus pulmones. Pocos datos son tan objetivos como el grave daño que ocasiona fumar sobre el organismo humano, y es por ello que nuestras autoridades sanitarias han impedido con esta nueva normativa que las enfermedades respiratorias ocasiones cada año muertes y lesiones crónicas a nuestros ciudadanos.
Muchso creemos que debió restringirse más drásticamente cuando se introdujo de manera sesgada la prohibición hace unos años.
Muchos conocemos cuánto costó que compañeros de trabajo admitieran de una forma democrática que su costumbre de fumar en donde otros no lo hacían era una agresión a su libertad... Ahora, por fin, se asume con lógica que lo que genera daño no lo provoque al de al lado... por lo menos.
Incluyo un dato más a tener en cuenta: es útil recordar que las cronicidades por fumar repercuten directamente en nuestros impuestos, los que pagamos todos. Y que podrían haberse dedicado o dedicarse en mayor medida si la salud respiratoria no se viera mermada tan directamenmte por el humo del tabaco.
Y por último, es muy útil recordar a todos los que van a ser exfumadores, lo positivo que resulta volver a recuperar sabores olvidados, voces claras, capacidades vitales al hacer cualquier esfuerzo físico o despertares matutinos sin tener que dedicar tiempo a extraer de su árbol bronquial secreciones que no debieran estar allí.

No hay comentarios: